miércoles, 7 de julio de 2010

Aire, plástico y corazón


 "La vida parece estar construida de forma que nadie pueda vivirla solo"
  Yoshino Hiroshi 

"Air doll / Kūki Ningyō) " (2009) es el último trabajo estrenado aquí del director de cine japonés Hirokazu Kore-eda. Para quien no sea asiduo de esta isla, recordarles que "Still walking / Aruitemo aruitemo" (2008), su película anterior, fue para mí uno de los mejores estrenos cinematográficos del pasado año (ver "Papá y mamá" ) .
En esta ocasión Kore-eda  no parte de una historia propia y retoma un viejo proyecto inspirado en el manga "La figura neumática de una chica" (2000, Gouda Yoshie) para proponernos una curiosa fábula urbana sobre una muñeca hinchable que cobra vida y se plantea una existencia ajena a su dueño. Vestida inicialmente de sirvienta sexy (que no les resulte extraño, indumentarias más chocantes se ven por las calles tokyotas y además, existen cafés donde las camareras van uniformadas de esa guisa) deambulará por un Tokyo atractivamente  inusual a la busqueda de un sentido a su existencia. A su alrededor se moverán una serie de hombres (la mayor parte de ellos incapaces de sentir, perversos, mezquinos o torpes) y mujeres ( autoaisladas por el vacio, el miedo o la ausencia) que, con sus respectivas cargas de soledad a cuestas, acabarán conformando un tapiz del aislamiento existencial en una gran ciudad. 

Dulce y perversa, cursi y amarga, tan ingenua como deliciosa, "Air Doll" reflexiona sobre el ser humano y el significado de la vida y lo hace con mimbres tan díspares como sugerentes. Kore-eda trabaja con estilo la composición visual apoyándose en la fantástica fotografía de Mark  Ping-Bing Lee (el co-cinematógrafo de "In the mood for love") y tiene una de sus mejores bazas en el espléndido trabajo de su protagonista, la encantadora Du-Na Bae( ya vista en "The Host", una de mis películas favoritas, y la primera actriz coreana en protagonizar una cinta japonesa). A destacar la imaginación en las transiciones de la muñeca del plástico a la  carne y el hueso, que aunan simplicidad, imaginación visual y poesía a partes iguales. No todo su contenido está compensado, y a veces puede llegar al empalago pero, en este año de cartelera tan poco atractiva, "Air Doll" se me antoja sumamente disfrutable y recomendable e incluye una de las mejores secuencias eróticas  vistas por un servidor en los últimos tiempos, tan sugerente como atípica, donde el aire deviene metáfora de vida y placer y que cuenta con su reverso cruel un poco más avanzado el metraje.

Les dejo por hoy con el trailer original japonés.   

4 comentarios:

Icíar dijo...

¡No sabes la desgracia! esta película no llega a Alicante ¿será posible? tengo que esperar a que el videoclub la traiga.

J Luís dijo...

No te creas, Icíar, que si me descuido, se me sale de la cartelera sin haberla visto. De todos modos, no le pierdas la pista a las películas de este gran director, creador de un cine hondamente humanista y sincero.

Carol dijo...

Hola! He llegado hasta aquí gracias a la recomendación que me hizo Icíar de tu blog, ya que sabe que me encanta tooodo lo que tenga que ver con Japón en concreto y con Oriente en general, y ha acertado! tengo que decir que me encanta tu blog.

En cuanto a Air Doll a mí fue una película que me gustó muchísimo, llevaba tiempo esperando poder ir a verl al cine. Me gustó especialmente esa mezcla aparentemente imposible de la que hablas de momentos empalagosos, momentos de reflexión y ese final atroz que me pilló totalmente de sorpresa.

Un saludo!

J Luís dijo...

Hola, Carol, bienvenida seas a estas costas, por las que espero volver a verte. Muchas gracias por tus palabras de apoyo a esta bitácora, las agradezco muchísimo. En cuanto a "Air Doll",bueno, he visto en tu blog el comentario que le dedicastes y lo suscribo punto por punto. Como le comentaba a Icíar, Kore-eda es imprescindible hoy día, básicamente por la dimensión humanista que aplica a su cine. Por cierto, me ha sorprendido gratamente encontrar en tu perfil tu predilección por una película como "Hacia rutas salvajes". Por aquí la destaqué como una de las mejores de 2008, y el hecho de que pasara casi desapercibida dice mucho de lo atrofiado que tenemos el sentido auténtico de la aventura y la libertad.¡Buen gusto, Carol!